El celebre explorador italiano Magellano fue el primero que se atrvò a dar la vuelta del mundo en barco. Circumnavigata el America del Sud, se dirigiò hacìa est y fue asì que descubriò el Arcipelago de las Filipinas en 1521.

 Desembarcado a  Cebù, fue acogido festosamente por el  Rey y por los indigenas de la ciudad. Rapidamente aquellos indigenas furon bautizados y Magellano para monstrar a ellos su benevolencia declarò guerra a un  loro enemigo, el Rey Lapulapu, que governaba en una pequeña isla cerca de Cebu llamada Mactan, y con sus hombres buscò de desembarcar. Pero Lapulapu, lo derrotò y lo matò en la playa.

Un solo barco logrò escapar y los sobrevivientos decidieron de continuar la vuelta de mundo. Esta empresa logrò y gracias a un miembro italiano del equipaje, Antonio Pigafetta, que escribiò sus memorias somos capaz ahora de saber algo de aquella historica aventura.

Solo despues de muchos años el reino de España, decidiò de conquistar el Arcipelago de la Filipinas. 

Miguel Lopez de Legaspi fue enviado para conquistar el Acipelago.

En Cebù no encontrò ningun cristiano, mas una pequeña estatua del Santo Niño Jesus, descubierta por algunos soldatos en la ruina de una casa, los hizo entender que de verdad magellano habìa estado allà y que Pigafetta habìa dicho la verdad. La estatua de Niño Jesus habìa sido ragalada por Magellao a la Princesa Juana.

Hoy todavìa el santo Niño es el protector de Cebù.